
Hay veces que la vida exige un cambio, una transición, como las estaciones. Nuestra primavera fue maravillosa pero el verano se ha terminado y nos perdimos el otoño. Y ahora, de repente, hace frío, tanto frío que todo se está congelando
Ahora puedo decir que aprendí dos cosas nuevas sobre mí. Me molesta mucho que todos quieran ser inolvidables, sobretodo porque algunos lo consiguen. También aprendí que en el amor y en la cocina, las combinaciones imposibles a veces resultan perfectas.